“Hemos errado en el tiro, y lo sentimos”. Con estas palabras, Apple ha pedido perdón por el polémico anuncio con el que este martes anunció una nueva generación del iPad, en el que una prensa hidráulica destruía completamente todo tipo de instrumentos musicales, entre ellos un piano o un tocadiscos.
“La creatividad está en nuestro ADN en Apple, y es increíblemente importante para nosotros diseñar productos que potencien a los creativos de todo el mundo”, ha señalado el vicepresidente de marketing de la compañía, Tor Myhren, en un comunicado compartido con el medio especializado Ad Age. “Nuestro objetivo es celebrar siempre la miríada de formas en que los usuarios se expresan y dan vida a sus ideas a través del iPad. Hemos errado el tiro con este vídeo, y lo sentimos”.
El martes, Apple presentó su nueva tableta, iPad Pro, publicitándola como su producto “más delgado hasta la fecha”. Para ello, la marca de la manzana mordida optó por un anuncio en el que una prensa hidráulica aplastaba una serie de objetos, desde instrumentos musicales a esculturas o botes de pintura, todos ellos relacionados con el mundo del arte. Al levantarse la prensa, solo quedaba su nuevo dispositivo.
Esa imagen pretendía celebrar el iPad como un producto capaz de concentrar todas esas facetas artísticas. “Imagina todas las cosas para las que se utilizará para crear”, tuiteaba Tim Cook, director ejecutivo de la compañía.
Sin embargo, la publicidad ha despertado una oleada de críticas de muchos creativos, que denuncian el “menosprecio” de Apple a los “símbolos de la creatividad humana”.
Ese malestar llega en un momento de creciente tensión por el impacto que la inteligencia artificial (IA) ya está teniendo en el trabajo creativo. “Hace cuarenta años, Apple lanzó el anuncio 1984 como una audaz declaración contra un futuro distópico. Ahora vosotros sois ese futuro distópico”, protestaba uno de los muchos usuarios que han mostrado su descontento.
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Uno de ellos ha editado el anuncio y le ha dado la vuelta para que la prensa hidráulica destruya el nuevo iPad Pro y, en su lugar, florezca todos los instrumentos de expresión artística aplastados.